6 razones para salirte del guión

6 razones para salirte del guión en las fotos de tu boda
6 razones para salirte del guión en las fotos de tu boda

en las fotos de tu boda

Quien crea que para fotografiar una boda solo se necesita un camino y listo está bien equivocado. Las fórmulas no existen, estas se quedaron atrás, en los pizarrones de gis o plumón (brecha generacional, ni modo), en la voz aburrida de ese profesor de matemáticas que solo repetía ideas mientras citaba el mentado libro de Baldor que, hasta el día de hoy, sigue dando miedo. Eso es lo que pasa cuando piensas en fórmulas o pasos bien esquematizados: horror y destrucción. Sorry, nos encanta exagerar. 

Las fotos de tu boda son un proceso y resultado que, entre más se salgan del guión, la herencia visual será más cool. ¿Sabes qué pasa? Muchas #powercouples le dan su confianza a Pinterest y a las mentadas listas de “las fotos obligadas de la boda” antes de dársela a su fotógrafo. Puede parecer muy práctico, y probablemente lo sea, pero tener los mejores recuerdos de ese día no va de la mano con lo práctico, mucho menos con solo apretar un botoncito o andar cargando la cámara como rockstar por toda la boda. 

Hay algo más…

“Ser tus ojos, pero intentar capturar el alma y no solo la apariencia física”

La idea es hacerlos sentir, no nada más capturar cómo se ven. Generar conexión y confianza. El secreto está en salirse de lo que ya se espera, y por supuesto esto jamás lo vas a encontrar en algo que ya exista. 

La apuesta es crear, hacerlo con valentía y darle una vuelta de tuerca a la tremenda fotografía de bodas.

Claro que para ser valientes, también hay que ser rebeldes

1. Tener otro set de ojos
2. Manos en acción
3. Cómo la vas a romper
4. Los personajes y hasta lo que sale mal
5. Contar el lado B
6. Buscarle definición visual al presente

1. Tener otro set de ojos

El Nick de tu Jess, el Peralta de tu Santiago son los protagonistas,

pero se perderán de muchísimos momentos de ese día. Lo que está bien chido es que cuando tú confías en tu fotógrafo, entonces la magia sucede… no hay de otra. 

El resultado final es igual a ver tu película, con atención y sin ponerle pausa. Ahí te das cuenta de la capacidad que hay para contar una historia desde los ojos de todos, incluso de los tuyos. 

Uno se transforma en la nuca de los novios.

2. Manos en acción

Tú solo ves el resultado final,

la canción completita con la melodía, pero te pierdes de buena parte del proceso. ¿Alguna vez has pensado en toda la gente que está involucrada para darle forma a tu boda?

Las fotos de detalle están lindas, la decoración puede ser la más cool, pero capturar todo el esfuerzo que hay detrás de cada evento es priceless. Tu florista y todo su staff poniendo una a una las flores para esos centros de mesa que elegiste, tu wedding planner corriendo de arriba a abajo para que todo salga perfecto, el banquetero con todo el desmadre de los platos…

Salirte del guión en las fotos de tu boda es ver desde muchas perspectivas todo el trabajo de colaboración que se hace entre tu dream team y ver más de cerquita cómo dieron el 100 para que todo saliera muy chido.

3. Cómo la vas a romper

Sobre todo con el tema del vestido y los anillos.

Seguro querrás recordar todos esos detalles, pero qué flojera hacerlo con fotos de catálogo que parecen reproducidas en serie. ¡No way, Jose!

Hay que contar la historia humana de quién lo usa y lo que hay detrás de esa fairy tale

4. Los personajes y hasta lo que sale mal

En un guión de peli, todo cuenta.

Hazte la idea que lo mismo pasa en tu boda. El venue, y hasta el clima, se tienen que ver en las fotos. Si llueve, ¡que llueva!; si hace un calor de la fregada, que se note en las chelas bien frías y las gotas de sudor; si te mueres de frío, que se sienta la misma vibrita de correr por un suéter. 

El ojo debe viajar, incluso en lugares pequeñitos, y más si se trata de dibujar fuera de la raya para ver qué hay más allá de lo que ya viste en todas partes. 

Seguro que querrás una foto, esa que de plano no puede faltar, pero no hay que clavarse en repetir las mismas ideas de todos los fines de semana. Haz de cuenta que el resultado visual de ese día se va a montar en una sala de exposiciones, ahora piensa qué reacciones te gustaría tener y qué emociones te gustaría generar en los demás. Easy as that!

Si la fórmula es unir los puntos para ver qué figurita sale, mejor hagamos nuestro propio patrón y vamos a crear algo chingón.

Porque además, los errores también cuentan y son parte de tu historia. Es más, son ese aderecito extra que le cae re bien a cualquier platillo, la gotita de salsa con la que el taco agarra más sabor. 

Imagínate todas las risas que se te van a salir cuando veas al mesero tirando las chelas en la mera hora del coctel, al bebé interrumpiendo la ceremonia con un buen berrinche o los pisotones que se dan entre todos a la mera hora de la fiesta. 

La boda no es igual a la foto perfecta. 

Es más, el día de tu boda 2+2 no será 4. Nada está puesto, todo se mueve y ahí está lo chido.

5. Contar el lado B

Porque el hecho de que tu fotógrafo sea la nuca de los novios,

también involucra buscar esos momentos en los que te luces como top model mientras entras a la iglesia tú solita (¿por qué tú sola? porque se puede y no pasa nada si lo haces), o de repente agarrar al novio sin camisa mientras rompe la pista de baile. Capturar al novio mientras se defiende de una abeja o al niño que agarró confianza y se metió debajo del vestido. 

Hay cositas que a veces se olvidan por estar pensando solamente en “las fotos obligadas”. Si traes el relojito a tope contándote cada minuto hasta que tienes que apagar la cámara, lo más seguro es que lo más especial se te escape y termines con una boda como miles. Fuck that!

Todo mundo cree que es oveja negra hasta que le toca pensar en el día de su boda. Para crear hay que aventurarse y eso no cualquiera lo hace. 

A veces hay que olvidar a los protagonistas y ver ese día como Rayuela y sus miles de posibilidades para leerla. Como ese doctor que se atreve a tomar un curso de reiki o que está a favor de los partos naturales. 

Siempre hay que despertar la curiosidad y el hambre por tener una visión más amplia.

6. Buscarle definición visual al presente

Porque la captura del momento siempre será más importante que la pena o la situación.

Y no, para nada es un rollo de ponerse morboso o indiscreto, sino una forma fuera del guión de conseguir esa foto fregona que jamás te hubieras imaginado de la boda. 

Se trata de estar más presente que el mismo presente. Hacer trascender un segundito que ahora forma parte de tu historia y de esa herencia visual que tendrás. 

Vamos a abrir las puertas que en situaciones cotidianas estarían cerradas

Entrar con cámara en mano a fotografiar el nacimiento de tus hijos, por ejemplo. Ver más allá para que ese recuerdo y esa lágrima o esa sonrisa sean las fotos que aún no sabes, pero vas a atesorar como ninguna otra. 

Para tener fotos únicas la técnica importa, sí, pero sobre todo que la vulnerabilidad abra camino y la confianza en tu fotógrafo trace todo lo demás. 

Ahí está el truco: dejarse llevar y crear.

¿Qué puedes hacer para que el flow en las fotos de tu boda esté con madre?

  • 01

    La honestidad es clave

    Entender la visión de tu fotógrafo y sumarte a ella como parte del team

  • 02

    Ver bodas completas

    Pero velas bien, checa la vibra de las fotos, las reacciones y emociones. Sumérgete por completo porque…

  • 03

    Hay que ser neta

    Si de plano ustedes no se ven identificados con el trabajo, díganlo. Lo más seguro es que terminen con una recomendación chingona de quién puede tomarles sus fotos.

  • 04

    Alimentar tu punto de vista

    Y no tenerle miedo a la visión de tu fotógrafo. Él puede ser el sonido de la máquina de escribir en la versión unplugged de “Nunca”, de Zoé… si no la has escuchado, ya tienes tareita.

  • 05

    No te claves en las bodas

    Hay vida más allá de lo que ves en pantalla. Aprovecha todo lo que tienes a tu alrededor para que entonces puedas

  • 06

    Proceso creativo

    Ver tu boda como un proceso creativo. Y alimentarlo de cosas interesantes, alucinarte con lo que otros artistas o creativos hacen, porque…

cuando hay influencia de cosas más chingonas, hay un punto de ventaja

Si quieres salirte de lo tradicional, piensa en que los novios son los guionistas y ahora deberán buscar al director que mejor desarrolle la historia. Ese lenguaje visual es la forma de expresarte, así que hay que hacerlo honesto y único. 

Vamos a envalentonarnos para crear una boda piradísima de chida. Entonces qué,

¿se arma o no se arma?

Let's do magic together